martes, 3 de junio de 2014

Reseñas cinematográficas: Malditos vecinos


Ficha Técnica

Título original: Neighbors
Director: Nicholas Stoller
Intérpretes: Seth Rogen, Rose Byrne, Zac Efron, Dave Franco, Christopher Mintz-Plasse, Jake Johnson, Lisa Kudrow, Ike Barinholtz, Ori Kalmus, Carla Gallo, Craig Roberts, Ali Cobrin, Halston Sage, Andy Samberg, Jerrod Carmichael, Adam DeVine, Blake Anderson, Brian Huskey.
Guión: Andrew J. Cohen, Brendan O´Brien
Música: Michael Andrews
Género: Comedia
Nacionalidad: Estados Unidos
Duración: 96 minutos
Año: 2014


Sinopsis:
Los Radner son una pareja que se acaba de mudar a un apacible barrio residencial para iniciar una nueva y madura vida junto al bebé que ahora tienen. Mientras tratan de compaginar su nueva vida como padres con la vida que quieren llevar y que todavía no han logrado dejar atrás, descubren que tienen nuevos vecinos, nada más y nada menos que unos universitarios que montan su fraternidad justo al lado de su nuevo hogar. Lo que en principio es una buena relación con los jóvenes, se va transformando hasta convertirse en una guerra por el vecindario donde no sólo la situación de ambas casas está en juego, sino también el propio futuro de los implicados.


Reseña:
Vecinos. Todos tenemos, ¿verdad? Vale, quizá no todos. No me imagino qué clase de vecinos puede tener aquella persona que vive en una casita en el interior de un espeso bosque alejado de la civilización. Quizás en ese caso hablemos de animales del bosque, fantasmas, espíritus al más puro estilo de la trilogía "Evil Dead" de Sam Raimi (Darkman, Spider-Man), y derivados. Ahora en serio, el tema de los vecinos es uno de los más realistas, verosímiles y cercanos que puedan darse en el cine, ya que, en condiciones normales, todos tenemos vecinos y todos somos vecinos de alguien, un tipo de relación que puede ir de buena a mala, pasando por la total indiferencia más allá de un "Hola" y "Adiós" en el rellano o las escaleras.

Por ello no es extraño que este tema haya sido bastante usado en el mundo del cine desde multitud de puntos de vista. Por ejemplo, Alfred Hitchcock (Vertigo, Psicosis) ya trató el tema desde el suspense con "La ventana indiscreta", ese gran clásico que nos demostraba que nadie puede terminar de conocer del todo a sus vecinos. Esto fue llevado al extremo con la cinta de terror "Noche de miedo", donde el joven protagonista descubría que su nuevo vecino era nada más y nada menos que un sanguinario vampiro. Y es que, hay que tener cuidado con quien se nos muda al lado, o con quien nos da los buenos días tan alegremente mientras se limpia la sangre de las manos. Algo parecido le pasó al protagonista de "Disturbia", filme también de suspense muy en la línea de la mencionada "La ventana indiscreta" pero mucho más moderna.

Nuevos y, ¿queridos? vecinos


Pero no sólo el suspense y el terror han tratado el tema de los vecinos. Sí, temer al vecino siempre da para una buena película de miedo, y más si éste es un asesino en serie o alguna especie de monstruo que pueda esconderse de los demás con su aspecto aparentemente humano. Precisamente, es algo que el escritor de terror R. L. Stine (La máscara maldita, Terror en la biblioteca) ha usado mucho en sus libros; la llegada de una familia nueva al vecindario, un joven protagonista haciéndose amigo de una nueva chica en el barrio, etc, etc. No se puede negar que el miedo a que nuestro vecino, alguien tan cercano, y a veces al que consideramos miembro incluso de nuestra familia, sea un peligro para nosotros y nuestros seres queridos. Pensadlo, lo que nos separa de nuestros vecinos es, en la mayoría de casos, una simple puerta. Nada más. Sí, da mal rollo, y aunque este tema da para muy buenas películas de terror y suspense, no son los únicos géneros que ha tocado el tema de los vecinos. Es más, hay un tercer género que se ha aprovechado bastante de nuestros vecinos: la comedia.

Sí, existen filmes dramáticos con vecinos de por medio. Sí, existen cintas de ciencia-ficción centradas en nuestros queridos vecinos. Pero el tercer género que más ha sabido aprovechar a estas personas que viven tan cerca de nosotros ha sido el de la comedia, aunque casi siempre desde un prisma muy parecido, y éste es el enfrentamiento entre vecinos. No es así en filmes como "La vecina de al lado", una comedia romántica bastante acertada donde el protagonista descubría que su nueva y joven vecina era una estrella del porno. En ese aspecto, es cierto que el tema de los vecinos da para muchas comedias románticas, o directamente cintas románticas, ya sabéis, todo lo que tiene que ver con la vecina de al lado, o ese guapo vecino que acaba haciendo caso a la protagonista. Pero lo habitual es ver que la comedia trata a los vecinos como enemigos irreconciliables que se pasan todo el metraje tratando de matarse.

Y eso mismo es lo que pasa en "Malditos vecinos" de Judd Apatow (Virgen a los 40, Lío embarazoso). Aunque, un momento, ¿cómo que no es de Apatow? Vale, es cierto, pero se podría decir que aunque ni siquiera está producida por él, sí que lleva su sello. No es casualidad que los guionistas de "Malditos vecinos" ya hayan trabajado antes en filmes de Apatow, ni tampoco que su gran amigo, Seth Rogen (Supersalidos, Juerga hasta el fin) sea uno de los productores de la película. Es más, me atrevería a decir que aunque ninguno de estos factores interviniese en la producción, seguiría siendo una película que podríamos encuadrar entre las que él suele hacer, una especie de película-copia de Apatow. Afortunadamente, sí que podemos situarla muy cercana a él por tener sus guionistas y a Rogen por ahí metido, tanto produciendo como protagonizando la historia.

El matrimonio protagonista intentando encajar con los recién llegados


El cine de Apatow, para quienes sois fans, o habéis visto algunas de sus películas (yo me declaro ya fan, por si no teníais claro que esto iba a ser una reseña positiva sobre "Malditos vecinos") es bastante reconocible. Son comedias con algo de drama en muchos casos y centradas, sobre todo, en hombres. Se dice que Apatow hace comedias románticas para hombres, así que ya os podéis imaginar de lo que os estoy hablando, pero si no, ya os pongo algunos ejemplos de filmes Apatow, estén dirigidos, producidos o escritos por él, o cercanos a su obra: "Supersalidos", "Lío embarazoso", "Paso de ti", "Virgen a los 40", "Si fuera fácil", "Todo sobre mi desmadre", "Te quiero, tío", "Juerga hasta el fin", "Superfumados", "Hazme reír", etc, etc. La lista es bastante larga entre unas y otras, pero todas comparten varios aspectos.

El primero de ellos es lo que os decía antes, comedias románticas centradas en hombres (por lo que el componente romántico es bastante menor que el de las habituales comedias románticas) y con pizcas de drama. Son filmes donde solemos ver a los actores, guionistas y productores de los que se rodea Apatow, como si siempre fuese una pandilla de amigos que se intercambian cromos para aparecer ahora en esta película, protagonizar esta otra, o hacer un cameo de segundos en la siguiente. Por ejemplo, Paul Rudd (Año uno, Los amos de la noticia), gran amigo de Apatow, igual es uno de los principales secundarios de "Virgen a los 40", que igual hace un divertido cameo en "Paso de ti", o protagoniza "Si fuera fácil". Más ejemplos, el mismo Seth Rogen era uno de los principales secundarios de "Supersalidos", una de las películas que asentó el estilo Apatow, pero luego protagonizó "Lío embarazoso", dirigida además por el mismo Apatow.

Creo que se va cogiendo ya lo que quiero decir, pero añadiré algunos detalles más que tienen en común los filmes de la factoría Apatow, o cercanos a dicha factoría. Hablo ahora del tema de la madurez, algo que Apatow coloca en todas sus producciones, diría que prácticamente en todas de forma bastante clara. Y en las que no se ve apenas, siempre revolotea sobre la trama, ya sea con alguno de los protagonistas, o con los secundarios del filme. Probadlo, coged cualquier película de Apatow y revisad su argumento, ya veréis como el paso de los personajes a cierta madurez por cualquier otro tema está muy, muy presente. Pongamos, por ejemplo, "Supersalidos", donde los dos adolescentes protagonistas, interpretados por Michael Cera (Scott Pilgrim contra el mundo, Año uno) y Jonah Hill (Paso de ti, Infiltrados en clase) otro de los habituales de las películas Apatow, maduraban a raíz de la fiesta que tenía lugar en la película, sobre todo con respecto a la relación que tienen entre ellos. No eran los únicos personajes que maduraban en el filme, e incluso los dos policías secundarios des-maduraban durante el metraje.

La casa de la fraternidad, preparada para cualquier fiesta


Otro ejemplo, "Virgen a los 40", donde observamos a un adulto anclado en su pasado e incapaz de madurar del todo debido a sus problemas con el sexo. Otro ejemplo claro es el de "Lío embarazoso", donde el protagonista debe madurar de golpe cuando la chica con la que ha pasado una noche de sexo descubre que está embarazada. E incluso en "Hazme reír", con Adam Sandler (Os declaro marido y marido, Niños grandes) como protagonista, éste debe madurar cuando descubre que le quedan meses de vida. Incluso en filmes como "Paso de ti", donde en principio el madurar no tiene mucho que ver con la trama principal, comprobamos que, en realidad, sí que tiene que ver, ya que el protagonista debe avanzar, dejar atrás a su ex y madurar con respecto a esa relación muerta que ha tocado tanto su vida. Y no hablemos de filmes como "Todo sobre mi desmadre", spin-off de "Paso de ti".

Tal es el éxito del cine de Judd Apatow que muchos reputados directores de comedia se han apuntado a su estilo en algún que otro momento. Ese es el caso de Kevin Smith (Mallrats, Dogma) y su "¿Hacemos una porno?" protagonizada, precisamente, por Seth Rogen, y donde el tema de la madurez también se daba, en este caso, en forma de relación de dos amigos que deciden rodar una película porno en la que, tarde o temprano, deberá acostarse y revelar sus sentimientos. Incluso los hermanos Farrelly (Algo pasa con Mary, Amor ciego) trataron de hacer su propia película Apatow con "Matrimonio compulsivo" protagonizada por Ben Stiller (Zoolander, Duplex), eso sí, en este caso, fallando bastante en el proceso. Incluso gamberradas entre colegas como "Juerga hasta el fin" contenían bastante de estos aspectos, incluida la pequeña oda a la madurez que tanto les gusta añadir a Apatow y sus amiguetes.

¡Pelea de bailones!


¿A qué viene todo esto? Pues me sirve para confirmar que "Malditos vecinos", aunque a priori no lo parezca, es una película tocada por las humorísticas garras de Judd Apatow. Y no lo parece en principio por su argumento y por lo que nos vende el trailer, y es que el filme, una vez visto, tiene mucho más de lo que parece a simple vista. Ojo, que lo que nos da los spots y trailers no es nada malo, y hay muchísimo de eso en la película es decir, del enfrentamiento entre los personajes de Seth Rogen y Rose Byrne (Insidious, X-Men: Primera generación) y el de Zac Efron (Siempre a mi lado, Cuando te encuentre) junto a su hermandad, pero también hay un tema que sobrevuela toda la parte humorística aportando sus gotas de drama, de ese drama del que os hablaba más arriba. Y eso es el paso hacia la madurez que deben vivir los personajes de Rogen y Efron, principalmente. ¿Os suena a algo que ya os he mencionado?

"Malditos vecinos" nos cuenta la historia de una pareja joven que se muda a un tranquilo barrio residencial como cualquier otro de Estados Unidos, con sus casitas separadas por vallas blancas, sus jardines bien arreglados, sus saludos vecinales cada mañana, su chico repartiendo periódicos con la bicicleta, etc, etc. Descubrimos que dicha pareja hace poco que tuvo una hija, un bebé que les está cambiando la vida aunque ambos se empeñen en continuar viviendo como si no tuvieran más responsabilidades que ir de casa al trabajo, y del trabajo a casa. Sin embargo, descubren que no es así, y que deberán madurar (¿veis?) para adaptarse a una nueva vida donde son padres y deben ser responsables, una vida que puede que sea mejor que la que llevaban.

Sin embargo, estos planes que van y vienen pueden estropearse debido a la llegada de los nuevos vecinos, unos universitarios, en realidad, una fraternidad que busca llevar a cabo la fiesta del siglo cuando acabe el curso, antes de que todos se despidan del mismo. La pareja protagonista, en principio, se preocupa ya que tienen un bebé y las fiestas universitarias no son conocidas por su silencio, así que van a visitar a los vecinos que se muestran extrañamente amables y comprensivos con su situación, hasta el punto de invitar a los jóvenes padres a una de sus fiestas donde reviven lo que eran antes de la pequeña. Aun así, los vecinos chocan, lo que iniciará una guerra donde la hermandad se la juega con la Universidad, y los dos miembros del matrimonio ponen a prueba su familia.

Fiestas en las que cualquier cosa puede pasar


La película tira principalmente, como os comentaba antes, del enfrentamiento entre vecinos, eso sí, sin llegar a los niveles cruentos y delirantes de otros filmes, sobre todo de los 80. Algo sorprendente, porque la lucha entre vecinos, más allá de un par de descacharrantes escenas (lo de los airbags, de los mejores "gags" de la película) es bastante realista y verosímil, con los personajes dándose caña pero sin llegar a extremos caricaturescos, mientras los dos protagonistas de la batalla, los personajes de Rogen y Efron, intentan arreglas sus vidas que se van a pique conforme el conflicto se recrudece. Así, mientras el personaje de Efron ve cómo la universidad está a punto de terminar, y no tiene planes de futuro al contrario que sus hermanos de fraternidad, el personaje de Rogen descubre que, quizá, no está preparado para su vida en familia, y que añora los tiempos en los que se iba de marcha junto a la que es su mujer al comenzar la historia.

Esta parte más dramática y seria es la más pequeña en la película, y también la más floja. Ojo, no es que sea mala, ni que esté mal tratada, todo lo contrario; su desenlace es bastante satisfactorio, correcto y, sobre todo, coherente con lo que se nos ha venido contando. Sin embargo, al tener mucho menos peso en la trama principal, esta "subtrama" se queda algo coja en el conjunto final. Tampoco es que importe mucho cuando llegamos al final de la película (que además tiene un un metraje muy ajustado de poco más de hora y media, todo lo que necesita para contarnos lo que quiere contarnos, ni más ni menos, un gran acierto), ya que por entonces lo hemos pasado mejor que bien con los gags y la batalla entre vecinos. Al menos, la parte dramática no entra en tópicos innecesarios que alarguen de mala forma la película, lo cual, digo de nuevo, hay que agradecer.

Los universitarios tendrán que conseguir dinero de cualquier manera


En cuanto a la parte principal del filme, la pelea entre los vecinos, es muy, muy divertida. Sinceramente, aunque al ver los trailers sabía que me lo pasaría bien con "Malditos vecinos", pero no tan sumamente bien. Cuidado, porque eso no quiere decir que estemos ante la comedia del año, ni siquiera ante una de esas películas que recordaremos por siempre, pero cumple su cometido a la perfección que es hacer pasar un gran rato en el cine. "Malditos vecinos" no sólo lo logra a través de personajes bien construidos e interpretados, sino también con diálogos de notable y, ante todo, con gags muy, muy buenos. Uno de los mejores es el que ya he comentado de los airbags, pero hay otros que sí son para recordar, como la pelea final entre el personaje de Efron y el de Rogen, o la fiesta de los Robert De Niro, por no hablar de esa escena en la que el personaje de Rogen discute con el de Rose Byrne el comprarse o no una pistola. Tremendo.

Pero todas estas escenas gamberras, desmadradas, divertidas y descacharrantes serían mucho menos efectivas sin el gran plantel de actores que se ha reunido bajo la dirección de Nicholas Stoller (Paso de ti, Todo sobre mi desmadre), realizador que, para más inri con lo que comentaba más arriba sobre los filmes Apatow, ya ha trabajado en varios de ellos antes, subiendo poco a poco el nivel de gamberrismo y bajando el drama, como atestigua con "Malditos vecinos". Stoller sabe lo que se hace, pero es evidente que su trabajo sería mucho menos gracioso sin, principalmente, los protagonistas. Es cierto que el personaje de Seth Rogen no es muy diferente a los que ya ha interpretado antes, es más, podría ser una continuación del que hizo en "Lío embarazoso", pero es por eso por lo que funciona tan, tan bien en este tipo de comedias.

Zac Efron, uno de los pilares de la historia


No es lo que le pasa a Rose Byrne, que durante su carrera ha pasado del fantástico a la comedia con bastante asiduidad. Por ejemplo, ya trabajó con Stoller en "Todo sobre mi desmadre", y es bastante recordado su papel en "La boda de mi mejor amiga", muy, muy gamberra pero, ¿quién no la recuerda en "X-Men: Primera generación" o "Insidious"? Da gusto ver tal versatilidad y, aunque en este filme está mucho más comedida que en algunas de las comedias mencionadas, le sienta muy bien desatarse como en escenas como la del baile cuando, junto a Rogen, trata de boicotear la vida personal del personaje de Efron, el tercer protagonista. Y debo confesar que el filme no funcionaría tan bien sin este actor, que interpreta no al típico macarra de universidad, sino a un tipo fiestero pero responsable que se ve provocado por alguien en quien se ve reflejado, o más concretamente, en el que ve reflejado su futuro "yo". A estas alturas, creo que ya hemos podido abandonar todos nuestras reticencias con Efron y su etapa de cara bonita en Disney, es más, diría que es mucho mejor actor de lo que se podría pensar en un principio, y aquí lo demuestra con creces, sobre todo sus dotes para la comedia, algo que también suele pasar en las películas con sello Apatow, y es encontrarnos con actores no demasiado habituados a este tipo de comedias comiéndose la pantalla.

En el plano de los secundarios, tenemos breves apariciones de actores cómicos que se han hecho un buen hueco en la televisión, o en el cine como secundarios de lujo. Entre ellos podemos contar al simpático Jake Johnson (New Hirl, Infiltrados en clase), Adam DeVine (Dando la nota, Modern Family), e incluso caras más conocidas como Andy Samberg (Desmadre de padre, Niños grandes 2) y Lisa Kudrow (Friends, Una terapia peligrosa). En cuanto a los secundarios más cercanos a los protagonistas, tenemos a Carla Gallo (Supersalidos, Dos chicas sin blanca), Ike Barinholtz (Casi 300, Disaster Movie) y, en papeles estelares, Christopher Mintz-Plasse (Supersalidos, Kick-Ass), uno de esos actores habituales de las películas de Apatow, y Dave Franco (Infiltrados en clase, Ahora me ves...), hermano pequeño de James Franco (Spider-Man, Juerga hasta el fin) que ya se ha hecho un buen hueco en los filmes Apatow donde su hermano mayor está tan cómodo.

La divertida fiesta de Robert De Niro


"Malditos vecinos" no es perfecta, claro. Como ya he dicho más arriba, la parte dramática se queda algo coja en el conjunto final y, aunque eso no moleste al final, un equilibrio más ajustado hubiera sido perfecto. Los amigos personales de los protagonistas están algo desaprovechados, hay escenas que, aunque divertidas, se quedan en nada comparadas con las que lo son muchísimo más, y hay un par de altibajos que despistan bastante de la trama principal. También queda algo raro que universitarios que están a punto de acabar sus carreras llamen viejos al matrimonio protagonista, ya que es evidente que no se llevan demasiados años de diferencia, y menos si vemos las edades de los actores. Si los de la fraternidad fuesen adolescentes, quedaría menos raro, pero al ser universitarios, y más en último curso, a veces resulta bastante chocante de mala manera.

Dejando pasar estos pequeños defectos, "Malditos vecinos" es una gran comedia gamberra. Vale, repito, no es una de esas comedias que cambian la vida, ni seguramente figurará entre mis diez películas favoritas del año, pero sin duda, es un filme perfecto para pasarlo bien durante más o menos hora y media. Tiene gags para recordar, un plantel de actores bastante efectivo, una trama muy bien llevada y que termina con coherencia, y el tono Apatow ayuda mucho, sobre todo si sois fans de su cine. El objetivo de una buena comedia es provocar risas y que el espectador se lo pase bien, y "Malditos vecinos" lo consigue con creces. Al menos, conmigo lo ha conseguido, porque ya tengo ganas de volver a ver la fiesta de los De Niro, o el combate final entre Seth Rogen y Zac Efron.


Nota: 7,5/10


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